miércoles, 3 de junio de 2020

Sierra Mágina VIII: Peña de Jaén (Jaén)



Andrés Segovia

 Sierra Mágina.

Esta pequeña sierra jienense que ostenta la mayor cota provincial ha provocado varias visitas. Hoy hemos (me acompaña Antonio) decidido ascender a la segunda altura de la sierra y de la provincia, la Peña de Jaén por su cara norte, por el denominado sendero de los neveros. Es el pico más occidental de la cuerda de Mágina.

Nos acercamos durante los primeros diez u once kilómetros por pista de tierra, para una vez alcanzada la cota de los 1.600 metros, dejar el carril y tras atravesar unos prados (a los pies de la Peña ya) ascender por un antiguo camino utilizado por los neveros para bajar el hielo de la sierra, aunque está sin señalizar, es reconocible ayudado por los hitos que los visitantes han ido componiendo a lo largo de la ascensión hasta alcanzar el collado (a la izquierda de la cima) donde sí volvemos a encontrar un poste indicador.

Este sendero alcanza el collado (2.100 metros) junto a una gran dolina (utilizada ella misma como nevero) a la izquierda de la Peña. A partir de aquí crestear un par de centenares de metros hasta alcanzar la cima, coronada por una cruz metálica.

Desde el carril que arranca por debajo del Puerto de la Mata y que nos lleva hasta el prado de Fuente Fría.

El objetivo de hoy: la Peña de Jaén (2.147 metros). 

Entre las localidades de Huelma y Cambil: A-324 (justo en el km. 13) arranca un carril que asciende entre olivos centenarios a la Dehesa de Mata Begid.

Apenas recorrido un kilómetro ya avistamos las ruinas del castillo de Mata Begid, junto a él una impresionante era y las ruinas de un cortijo también en ruinas, que visitaremos a nuestro regreso, ya que hoy el recorrido es lineal.

Tenemos que seguir por el carril alrededor de 10 km. ascenso que se ameniza con los majestuosos ejemplares de encinas y quejigos en los márgenes de la pista. Tronco horadado por decenas de agujeros (algunos con más de diez centímetros de profundidad) y sin embargo consigue mantener ramas verdes.

El ascenso nos permite admirar panorámicas como esta.

Los quejigos, algunos de tamaño gigante, no tienen hojas todavía pero si los adornan los verdes del muérdago que los parasita.

Balsa a rebosar junto a las ruinas del cortijo de Los Prados tiene al menos dos usos: punto de aprovisionamiento en caso de incendio forestal y como reserva para la reproducción de los anfibios residente de la zona.

Unos metros por encima de la balsa y de las ruinas del cortijo esta fuente anunciada con el preceptivo indicador.

Unos centenares de metros carril adelante esta construcción "El Cortijillo".

Y junto a él un largo abrevadero del que nuestra llegada desaloja un rebaño de ovejas.



Algunas de las encinas llaman la atención por el espacio que llegan a ocupar.

Quejigo y encina en este espacio adehesado.

Tras desviarnos por un ramal a la derecha antes de alcanzar el Puerto de la Mata (con los indicadores verticales pertinentes), y recorrer un par de kilómetros alcanzamos un extenso prado al pie de la Peña de Jaén. Toca ascender alrededor de 400 metros verticales, en lo que invertimos alrededor de hora y cuarto.

Un grupo de cinco cabras casi en la cima de la Peña de Jaén.

En esta Peña no hay hito pero sí cruz. Al fondo el Almadén con su conjunto de antenas.

Los dos en la cima de la Peña. Foto cedida por Antonio M.

Desde la cima de la Peña de Jaén dirección suroeste.

Me llamó la atención los contrastes en la misma planta separados por el propio tronco. 

Este otro buscó acomodo en la grieta de la roca y ahora la está destrozando literalmente, posiblemente cuando termine su trabajo en la roca que lo cobija provocará su muerte simultáneamente al quedarse sin sujeción y protección.

En esta cara norte nos encontramos pequeños ventisqueros que el sendero atraviesa. Mi compañero en uno de ellos.


Llamativo ejemplar que coloniza estas rocas calcáreas; es relativamente frecuente al menos en esta cara norte entre las cotas 1600 - 1800. Arenaria alfacarensis, especie endémica de las Béticas (con una distribución que ocupa las provincias de Granada, Jaén y parte de Albacete), coloniza suelos y rocas calizas entre las cotas 1500 - 2000 metros.

Este otro liquen me llamó la atención por forma y color; de estos sólo avisté éste ejemplar no se si debido a su escasez o a mi deficiente búsqueda.

De nuevo en la pista junto a los prados y el poste indicador.

Parada de nuevo en la Fuente del Cortijillo, esta vez sin ganado que desplazar.


Encina ahuecada aparentemente por un rayo: dentro del hueco hay espacio más que suficiente para mas de una persona. Foto cedida por Antonio M.

Interior del tronco: jugando con un rayo de sol que se cuela por uno de los agujeros del tronco.

Otra toma del vaciado interior del tronco.

Algunos ejemplares, una vez concluido su ciclo vital, consiguen permanecer durante años.

De regreso visitamos detenidamente las ruinas del castillo de Mata Begid. Esta torre es la única que mantiene un interior visitable, todo lo demás ruinas. El castillo controlaba el paso entre Cambil y Torres a través del Puerto de la Mata. Su situación lo hizo deseable tanto para musulmanes como para cristianos.

Vista de las ruinas del castillo con la enorme era al fondo. Al otro lado de la pista las ruinas del cortijo del Castillejo, al que pertenecía la era de trilla, construida en piedra seca y que aun hoy se muestra casi íntegra.


Peña de Jaén (Sierra Mágina), 25 de febrero de 2020.













No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por darme tu opinión